
Es el caso de Gianni de Fabritis, de la Universidad Pompeu Fabra de Barcelona, que ha logrado que un centenar de propietarios de PS3 cedan los tiempos muertos de sus dispositivos de juegos para investigación biomédica.
El proyecto de computación voluntaria y distribuida se llama PS3Grid y reúne el poder de cálculo de consolas de todo el mundo a través de internet para realizar "simulaciones dinámicas moleculares".
Quienes desean colaborar sólo tienen que descargar del sitio web de la iniciativa un programa informático que luego hacen funcionar en su consola a través de una llave USB. Los voluntarios avanzados pueden incluso crear una cuenta de usuario que les permite controlar que tiempo de cálculo han donado al proyecto.
El uso de PS3 en lugar de ordenadores resulta interesante para los investigadores porque la consola de Sony ofrece un mayor rendimiento gracias a su procesador Cell. Según explican desde PS3GRID "el procesador Cell equivale casi a 20 PCs (...) Si 1.000 personas se unen en este esfuerzo cooperativo, seremos capaces de computar un equivalente a 16.000 ordenadores de simple núcleo".
Según el sitio Physorg 130 voluntarios han cedido ya tiempo de su consola para la investigación biomédica. Una gran ayuda pero lejos aún de lo que podría representar la colaboración de los usuarios del dispositivo de juego. "Dado que actualmente existen 3 millones de PS3 en el mundo, el poder de computación que podrían aportar todas es equivalente al de un gran superordenador", afirma De Fabritis en este medio.
No hay comentarios:
Publicar un comentario